Como vimos en anteriores post, uno de los métodos de trabajo actorales más conocidos y trabajados en el mundo es el del ruso Stanislawski y las diversas tendencias que han llegado hasta nosotros. Pero, no es el único método al que podemos agarrarnos a la hora de trabajar un personaje, os presentamos aquí las bases de otro de los métodos interpretativos: El método Grotowski.
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¿Quién es el creador del método Grotowski?
Jerzy Grotowski nace en Polonia en 1933, llega a ser profesor de la escuela de Teatro de Cracovia, pero sobre todo se le conoce como director teatral y por sus investigaciones acerca del trabajo actoral.
¿En qué consiste el método Grotowski?
Huye del teatro convencional, aborrece del uso clásico del texto, así como de la escenografía tradicional (uso de luminotecnia, vestuario…) para buscar un teatro basado casi exclusivamente en el actor, en su trabajo físico y psicológico. Llega así a alcanzar lo que él llama “Teatro pobre”.
Grotowski busca elementos de otras técnicas: Meyerhold, Artaud, hasta el propio Stanislawski le sirve de inspiración, pero las mezcla con el Teatro japonés, hindú y chino, buscando su sello personal en el “Laboratorio”.
Para Grotowski la crisis del teatro está en estrecha relación con la crisis de la cultura contemporánea. El ritmo de vida en la sociedad moderna se caracteriza por «una serie de tensiones, un sentimiento de destrucción, el deseo de ocultar los motivos personales y la adopción de diversas máscaras para la vida».
El ser humano sufre de una ausencia de totalidad, es por ello que para el autor, el teatro tenga posibilidades terapéuticas dentro de la sociedad actual.
El entrenamiento del actor
Grotowski afirma que no se pueden enseñar métodos prefabricados, pues solo conducen a estereotipos, según él, cualquier método que no se proyecte hacia lo desconocido es malo.
Todo entrenamiento puede servir como inspiración para una investigación personal, siempre basada en la propia experiencia del actor o actriz.
El cuerpo del actor
Los movimientos corpóreos que trabaja Grotowski con sus actores son ejercicios “Psicofísicos”, es decir, las asociaciones del cuerpo son también asociaciones de sus sentimientos.
Estos entrenamientos son ejercicios que los actores idean o toman de otros métodos: calentamientos, trabajos de máscara facial… pero que nunca deben ser trabajados como meros ejercicios gimnásticos, sino buscando justificaciones personales con imágenes.
En una representación el actor o actriz tiene su partitura (texto, acción…), la cual debe respetar, pero puede introducir cambios minúsculos, de forma que cada vez que sube al escenario lo haga de manera diferente. Así el actor en escena debe aprender a escuchar, observar y responder a sus más inmediatas acciones y a las de sus compañeros.
Para Grotowski “actuar es reaccionar”, no dirigir el proceso, sino referirlo a las experiencias personales y luego conducirlo.
El teatro de Grotowski nace de una búsqueda constante, de un replanteamiento de lo que hasta el momento se conocía; las relaciones del actor con el director, del actor con el espectador e incluso con el propio texto, creando nuevas vías y lenguajes escénicos y confrontando nuestras más íntimas raíces con nuestra conducta como seres del siglo XXI. Todo un reto.
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